El CoE-CRVS adopta un enfoque de ciclo de vida para el registro civil y las estadísticas vitales, generando evidencia y creando capacidades para registrar cada nacimiento, matrimonio, divorcio y muerte, al tiempo que mejora los sistemas CRVS en países de ingresos bajos y medios mediante asistencia técnica directa, fortalecimiento de capacidades e intercambio de conocimientos.
Transformando vidas desde el nacimiento hasta la muerte a través de sistemas inclusivos de registro civil y estadísticas vitales

Imagine vivir una vida plena sin dejar un rastro oficial de su existencia. Esta es la realidad de millones de personas en todo el mundo cuyos nacimientos, matrimonios, divorcios y muertes nunca se registran oficialmente. El impacto se extiende mucho más allá de tener una identidad formal. Sin registro de nacimiento, muchos no tienen acceso a derechos humanos básicos: atención médica, educación, protección contra el matrimonio infantil y más.
Ahí es donde entra en juego el Centro de Excelencia para el Registro Civil y Sistemas de Estadísticas Vitales (CoE-CRVS, por sus siglas en inglés). Establecido en el IDRC en 2016, ahora está albergado en el Fondo de Población de las Naciones Unidas.
Garantizando que nadie se quede atrás
El trabajo del CoE-CRVS es esencial y cambia las vidas, porque el acceso a los derechos humanos fundamentales, como el derecho a un nombre y a la ciudadanía, tiene un efecto en cadena sobre las personas, las familias, las comunidades y las sociedades Estos derechos son fundamentales para conectar a las personas con las oportunidades en la vida.
Los sistemas CRVS garantizan que las personas que experimentan vulnerabilidades, tales como las niñas y las mujeres, los refugiados, las minorías y las comunidades LGBTQI+, sigan siendo contabilizadas y no sean dejadas atrás. A nivel nacional, un sistema de datos de población fragmentado da como resultado una comprensión incompleta de las realidades demográficas, lo que afecta la planificación de programas, servicios públicos y políticas. Sin esos datos de población completos y confiables, la magnitud de los problemas más profundos de la sociedad sigue sin estar clara, lo que dificulta el desarrollo de soluciones específicas e impactantes.
Fomentando sistemas CRVS transformadores de género
Las mujeres, los niños y las poblaciones marginadas suelen ser invisibles en los sistemas CRVS. Uno de cada cuatro niños menores de 5 años no se registra después del nacimiento, y cuando se hace, muchos no tienen prueba del registro. El registro de otros eventos de la vida a menudo no se completa. Por ejemplo, solo el 60% de los matrimonios en Brasil en 2010 y el 21% en Senegal en 2013 se registraron oficialmente. La brecha afecta desproporcionadamente a las mujeres, ya que la ausencia de un certificado de matrimonio socava sus derechos a la propiedad, la herencia y la custodia parental. Por estas razones, el CoE-CRVS está integrando perspectivas de género y el uso de un enfoque del ciclo de vida en el CRVS.
El centro promueve los sistemas de registro civil y de vacunación como base para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. Mediante el apoyo técnico, ayuda a las autoridades nacionales a producir estadísticas vitales desagregadas por sexo a partir de los datos del registro civil. En Kenia, las autoridades nacionales elaboraron 47 fichas informativas específicas para cada condado con el fin de mejorar la gobernanza basada en datos. Estas fichas informativas aumentan la disponibilidad y accesibilidad de los datos para la planificación y el seguimiento a nivel subnacional. Se espera que los formuladores de políticas utilicen la evidencia de las fichas informativas para mejorar su programación, planificación y establecimiento de prioridades.
Ghana fortalece el registro de nacimientos y defunciones
En Ghana, hacer que cada vida cuente y contar cada vida ha servido como fuerza orientadora detrás de la modernización de las prácticas de registro civil y estadísticas vitales. En el 2020, el país introdujo la Ley de Registro de Nacimientos y Defunciones de 2020 (Ley 1027), que obliga a registrar todos los nacimientos, muertes fetales y muertes en general. Para el 2022, el sistema de registro de nacimientos y defunciones se descentralizó, otorgando a los registradores de distrito la facultad de registrar estos eventos. También se introdujo un sistema de registro y pago en línea, que eliminó las barreras relacionadas con la distancia y los viajes, y benefició especialmente a las comunidades rurales y remotas.
Los resultados fueron espectaculares. Si bien en el 2018 solo se registraron el 68,6% de los nacimientos y el 16,5% de las muertes, en el 2022 la proporción aumentó al 92,7% en el caso de los nacimientos y se duplicó con creces hasta el 37,8% en el caso de las muertes. Además de cifras de registro mucho más altas, el caso de Ghana es un ejemplo importante de las posibilidades que surgen con un sistema de registro sólido.

“Las estadísticas vitales son más que puntos de datos”, explicó Constance Clara Anani, directora de Estadísticas, Investigación, Monitoreo y Evaluación del Registro de Nacimientos y Defunciones de Ghana. “Los datos del CRVS transforman las cifras en información práctica, impulsando reformas en el sistema de salud y dando forma a políticas para abordar desafíos tales como la hipertensión y las disparidades en la salud materna”.
¿De qué manera la visibilidad de los datos mejora la salud pública? En Ghana, el registro de causas de muerte reveló que la hipertensión era la principal causa de muerte por enfermedades no transmisibles, lo que impulsó a las autoridades sanitarias regionales a mejorar la detección y el manejo de la hipertensión en el país.
De manera similar, cuando se reveló que más de una cuarta parte del total de nacimientos registrados en cuatro regiones (norte, noreste, Oti y Savannah) ocurrieron en el hogar sin un asistente de salud capacitado, el Servicio de Salud de Ghana tomó medidas y asignó más parteras a esas regiones y otros distritos en riesgo.
Con el apoyo técnico del CoE-CRVS y la dedicación a mejorar los resultados sanitarios, Ghana es un ejemplo de cómo las medidas estratégicas e intencionales pueden garantizar que se reconozcan la identidad y los derechos de todas las personas desde el nacimiento.
“La gobernanza inclusiva comienza con datos inclusivos. Al documentar cada nacimiento y cada muerte, podemos elaborar políticas que realmente no dejen a nadie atrás, garantizando que las estadísticas vitales sigan informando las políticas, atrayendo inversiones y dando forma al futuro de Ghana para las generaciones venideras”, afirmó Anani.
Solo quedan cinco años para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, incluyendo la “identidad legal para todos”, una de las metas del ODS 16 sobre paz, justicia e instituciones sólidas. La investigación y la formulación de políticas basadas en evidencia, en combinación con medidas estratégicas a nivel de país, son fundamentales para hacer visible a cada persona dentro de los sistemas CRVS y garantizar que tengan los derechos que merecen, desde la cuna hasta la tumba.