Igualdad de género: lograr un impacto transformador

Una chica de 16 años se abre paso por un callejón concurrido en un suburbio de Dakar. Tiene muchas cosas en que pensar. Tiene una pregunta relacionada con su salud reproductiva y ha estado teniendo dificultades para encontrar una respuesta confiable. Escuchó el rumor de que podría haber una clínica de salud al final de este callejón, pero no puede encontrarla. 

Ella está lidiando sola con este problema de salud porque tiene demasiado miedo de pedir ayuda a sus padres o maestros. Tiene demasiado miedo a ser juzgada. Muchas adolescentes en Senegal enfrentan problemas de salud reproductiva (desde períodos dolorosos hasta necesidades anticonceptivas y abuso sexual) con poco apoyo. Existen servicios de salud reproductiva para niñas adolescentes, pero las investigaciones del Ministerio de Salud han demostrado que pocas saben cómo acceder a ellos.

Esta historia es un ejemplo de cómo las normas y actitudes de género culturalmente arraigadas pueden dictar la calidad de la atención médica de una mujer. Las normas y actitudes no sólo afectan su salud; también pueden influir en su movilidad, seguridad, educación, sustento y muchos otros aspectos de su vida. 

La desigualdad de género, y cómo las personas la experimentan en hogares, organizaciones y comunidades, es el producto de la manera en que se diseñan, negocian e implementan los diferentes sistemas y estructuras sociales. En estos niveles, influir en el cambio positivo depende de las pruebas que trascienden la simple identificación de las desigualdades. 

El apoyo práctico, los servicios y la capacitación pueden contribuir en gran medida a mejorar las oportunidades para las mujeres. Sin embargo, para garantizar que estas oportunidades sean sostenibles y se basen en las realidades locales, necesitamos confrontar las normas y los sistemas subyacentes que son la causa principal de las desigualdades de género.

En todo el mundo se reconoce cada vez más que no alcanza solo con ser conscientes sobre las disparidades de género y que un cambio importante y sostenible exige transformaciones institucionales y sistémicas. La investigación que se enfoca en abordar este tipo de cambio fundamental a menudo se denomina transformadora de género.

 ¿Qué es la investigación transformadora de género y por qué es tan importante? 

La investigación transformadora de género examina, cuestiona y analiza las causas subyacentes de las desigualdades de género y construye una base de evidencia para abordarlas. Promueve el empoderamiento de las mujeres, lo que incluye el control compartido de recursos y la toma de decisiones. Analiza las desigualdades sociales y brinda espacio para que mujeres, hombres y géneros no binarios aprendan. E involucra a personas en todo el espectro socioeconómico para cambiar las normas que permiten las desigualdades. 

La investigación es transformador de género si se abordan estas consideraciones en su fundamento y metodología, y si incluye un análisis riguroso de las causas principales, las relaciones de poder entre los géneros y la interseccionalidad (las distintas vulnerabilidades que experimentan las personas o los grupos, tales como la raza, la clase, la orientación sexual y el origen étnico, además del género). Este enfoque de la investigación es importante porque aborda las desigualdades de maneras que reflejen las experiencias vividas y promueve soluciones sostenibles que se ocupan de las causas principales. 

En Senegal se están llevando a cabo investigaciones transformadoras de género para abordar la falta de acceso a la salud y los derechos sexuales y reproductivos. Apoya a los jóvenes, especialmente a las adolescentes, para que ejerzan y defiendan eficazmente sus derechos de acceso y disfrute de la salud reproductiva. 

Por ejemplo, un centro digital y comunitario creado por la organización senegalesa ALPHADEV brinda a los adolescentes acceso a información y asesoramiento sobre atención reproductiva y violencia de género, y oportunidades para compartir recursos, sin temor a ser juzgados o represalias. Forma parte de Mejor salud reproductiva para las adolescentes en Senegal – ADOS, una asociación entre el Ministerio de Asuntos Globales de Canadá y el IDRC. 

ALPHADEV colaboró con adolescentes para diseñar el centro. Se puede acceder al mismo a través de tecnología móvil, pero también proporciona información en persona en lo que se le conoce como tiendas de asesoramiento para cualquier persona que no esté conectada a Internet. El piloto involucra a 200 adolescentes, el 60% de los cuales son niñas, y el equipo ahora está considerando formas de implementar la iniciativa en todo el país. Es el comienzo de un cambio en las normas en torno a la salud reproductiva de los adolescentes y la prevención de la violencia de género en el país. 

Investigación de género en el IDRC 

El centro digital y comunitario de ALPHADEV forma parte de un impulso del IDRC para apoyar más investigaciones transformadoras de género. BGenerar evidencia sobre la igualdad de género ha sido una prioridad para el IDRC a lo largo de su historia, desde garantizar que las mujeres participen en proyectos de investigación como investigadoras y beneficiarias hasta identificar cómo ampliar servicios muy necesarios, como el cuidado infantil  o los derechos de salud sexual y reproductiva. 

Todas las investigaciones apoyadas por el IDRC consideran el género en su justificación y la mayoría aborda la igualdad de género a través de la participación significativa de las mujeres en comunidades marginadas, por ejemplo, o generando nuevos datos sobre la desigualdad de género. Además de estas contribuciones, el IDRC estima que el 17% de su apoyo a la investigación se invierte en trabajos transformadores de género. Al momento de escribir este artículo, el Centro está apoyando 143 proyectos activos transformadores de género con una inversión de 149 millones de dólares canadienses.

He aquí una muestra de algunos de dichos proyectos:

Transformando las relaciones de género es una revisión de 10 años de programación de género del IDRC (del 2008 al 2018), ofreciendo un análsis profundo de seis proyectos transformadores de género. 

Estamos evolucionando continuamente en nuestro esfuerzo por perfeccionar un enfoque estratégico y sistemático hacia la igualdad de género en la investigación que apoyamos, incluyendo la igualdad para las personas con diversidad de género. En nuestra Declaración de Igualdad está consagrado el compromiso de apoyar a investigadores y defensores expertos que trabajan para transformar normas, estereotipos y desigualdades perjudiciales en sus países y comunidades.

A través de estas inversiones, el IDRC está contribuyendo a la Meta 5 de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible de la ONU que exige acciones continuas para reducir la desigualdad de género y empoderar a las mujeres.

El compromiso del IDRC con la igualdad de género está también claramente alineado con la Política Feminista de Asistencia Internacionalde Canadá que refleja el compromiso de Canadá con la igualdad de género en el país y en todo el mundo.