Existen contaminantes ambientales, provenientes de distintas fuentes, que contaminan el agua, el aire y la tierra, ponen en riesgo a los seres humanos y a los ecosistemas, y generan conflictos entre las poblaciones y las industrias. Al analizar los intereses divergentes y sus implicaciones dentro de un enfoque global del ecosistema, los enfoques de ecosalud se esfuerzan por proteger la salud a la vez que equilibran las necesidades de diversas partes interesadas y contribuyen a la preservación del ecosistema.
El desafío
En todas partes del mundo, miles de productos químicos de diferentes tipos plantean serios riesgos para la salud humana y de los ecosistemas. Las poblaciones de los países en desarrollo se encuentran especialmente en riesgo porque, a menudo, sus países no disponen de una regulación adecuada y cuentan con pocos recursos para aplicar la normativa existente. Además, se encuentran con obstáculos que les impiden acceder a tecnologías “más limpias”. Generalmente las personas tienen poca capacidad para protegerse y hacer oír sus voces en los debates políticos.
Claramente, el desarrollo económico es fundamental para los medios de subsistencia de las comunidades y el bienestar de los países, pero suele ser una fuente de contaminación ambiental peligrosa. Las actividades humanas cotidianas, como la cocina, la calefacción y el transporte, también producen contaminantes. Esta contaminación afecta, principalmente, a la gente más pobre y desfavorecida.
Los seres humanos están sufriendo las consecuencias de estos contaminantes en varios niveles: desde el daño directo a la salud a través del cáncer, el deterioro neurológico y otras dolencias, hasta la contaminación de la cadena alimenticia y la incapacidad de los ecosistemas para absorber los desechos y cubrir las necesidades vitales. Estos problemas complejos y urgentes requieren enfoques innovadores, flexibles y orientados a la acción para encontrar soluciones.
¿Qué está ocurriendo?
En respuesta a este desafío, el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (IDRC) brinda su apoyo a investigaciones y redes de ecosalud para desarrollar respuestas sustentables a la contaminación ambiental. Los proyectos de ecosalud generan un conocimiento científico sólido y desarrollan la capacidad de los investigadores y las comunidades locales, al tiempo que buscan influir en las políticas para mejorar, efectivamente, la salud humana y proteger a las comunidades de los países en desarrollo de la contaminación ambiental.
Proyectos de México, Ecuador e India dan testimonio de estos logros.
Creación de conocimiento
En los países en desarrollo, investigadores apoyados por el IDRC aplican con éxito los enfoques de ecosalud para producir conocimiento en relación con un buen número de problemas de contaminación ambiental.
Los vínculos entre la contaminación por manganeso y el deterioro neurológico en México
En el distrito de Molango, México, se explotan, desde la década del 60, los ricos depósitos naturales de manganeso. Las relaciones entre las compañías mineras y las comunidades circundantes se han ido deteriorando, a medida que las poblaciones locales fueron observando una baja del rendimiento de su producción agrícola, su medio de subsistencia tradicional, y la atribuyeron a las emisiones de polvo y humo de las minas. Muchas familias responsabilizan a la compañía por la contaminación ambiental y los problemas de salud que sufren.
En 2002, un equipo de investigadores en ecosalud comenzó a estudiar el transporte de manganeso a través de diferentes componentes del ecosistema y, en última instancia, sus repercusiones sobre la salud humana. Descubrieron que el aire contaminado, más que el agua o los alimentos contaminados, era la principal fuente de exposición. Siguieron la trayectoria del manganeso desde las chimeneas de las minas, a través del viento y del polvo, e incluso de los recorridos de los camiones hacia los hogares. El equipo demostró que la exposición al manganeso provocaba deficiencias motrices en los adultos, especialmente en mujeres. Asimismo, se constató que los niños corrían el riesgo de sufrir problemas en el sistema nervioso. Estos resultados implicaron cambios concretos en las políticas locales, que se detallarán a continuación.
La minería al servicio del conocimiento en Ecuador
En la cuenca del río Puyango, en Ecuador, la extracción artesanal del oro es moneda corriente. Debido a la tecnología rudimentaria y a la falta de regulación, estas actividades son ineficientes, peligrosas, contaminan el medio ambiente y ponen en riesgo a la población.
La fundición del mineral de oro libera muchos metales pesados tóxicos. Los investigadores determinaron, en primera instancia, los niveles de exposición al mercurio y al plomo de las poblaciones ubicadas aguas arriba y aguas abajo. Se esperaba encontrar que las poblaciones ubicadas aguas abajo presentaran una mayor exposición al mercurio liberado por las actividades mineras desarrolladas aguas arriba, a través del consumo de pescado. Según una investigación anterior financiada por el IDRC, en el Amazonas, la erosión que provoca la deforestación libera el mercurio que se produce naturalmente en el suelo. Posteriormente, este mercurio se lava en el río, donde se transforma en metilmercurio tóxico, que se acumula en la cadena alimenticia acuática. Pero este fenómeno no se observó en el río Puyango. El estudio registró que los trabajadores de las plantas de procesamiento de mineral de oro ubicadas aguas arriba eran los únicos que estaban expuestos al mercurio, a través de los procesos de amalgamación y quema.
Por otra parte, los investigadores descubrieron que el consumo de agua y pescado en las comunidades ubicadas aguas abajo se relacionaba con problemas de aprendizaje y del sistema nervioso. En lugar de ser la causa del envenenamiento por mercurio, estos problemas podrían estar vinculados al plomo y al manganeso presentes en el río. El estudio investigó otras fuentes de exposición al plomo. Una vez más, las industrias dedicadas a la fundición de mineral estaban implicadas como una fuente de exposición para los trabajadores, así como el uso de ollas de cocina hechas de aleaciones metálicas que contienen plomo, tanto en las comunidades ubicadas aguas arriba como aguas abajo. También se encontró arsénico en el río Puyango.
La investigación mostró que la contaminación de la cuenca del río Puyango por metales pesados se debía, claramente, a las minas de oro ubicadas aguas arriba. Las comunidades aprovecharon estos resultados para exigir determinadas acciones a los responsables de tomar decisiones.
Los propietarios de canteras de piedras en India trabajan para mejorar las condiciones medioambientales
En el estado de Madhya Pradesh, en India, la extracción y trituración de piedra proporciona un ingreso de dinero extra a los agricultores locales. No obstante, se trata de un trabajo sucio, ruidoso y peligroso. En consecuencia, los trabajadores suelen padecer enfermedades respiratorias, problemas auditivos y lesiones. Sus comunidades también se ven afectadas por el polvo y el ruido, además de una mala alimentación crónica y un acceso inadecuado a los servicios sanitarios.
Un equipo de investigadores en ecosalud trabajó junto con las partes interesadas, con el fin de evaluar los riesgos para la salud y llevar a cabo soluciones. El equipo reforzó la capacidad de los proveedores de salud de la comunidad para diagnosticar y monitorear enfermedades respiratorias, a través del suministro de equipamiento y capacitación, con el fin de acortar distancias entre los profesionales y la comunidad. Los propietarios de la planta también acordaron utilizar la tecnología de reducción de polvo desarrollada por el equipo del proyecto.
“Dado que en el proceso se involucraron propietarios de canteras, residentes de la comunidad, profesionales de la salud, grupos juveniles, reguladores e incluso formuladores de políticas, es muy probable que las repercusiones del proyecto perduren y se multipliquen muchas veces en el futuro cercano”, afirma la Dra. Kalpana Balakrishnan, quien codirigió la investigación con la Dra. Vijaya Lakshmi. Ambas investigadoras consideran que ha mejorado drásticamente la capacidad de la comunidad para manejar riesgos.
Desarrollo de capacidades
El IDRC se esfuerza por desarrollar la capacidad de los investigadores y las organizaciones locales para generar resultados significativos y promover la excelencia en la investigación. A través de las actividades de investigación, los proyectos de ecosalud también buscan empoderar a las comunidades para que puedan hacerse cargo de sus propias cuestiones de medio ambiente y salud.
Una comunidad de práctica cobra fuerza en América Latina y el Caribe
La comunidad de práctica de ecosalud para reducir la exposición a tóxicos en América Latina y el Caribe (COPEH-TLAC) comenzó a funcionar, en 2006, con 13 científicos provenientes de 6 países. En 2007, ya contaba con más de 120 miembros de 25 países, distribuidos en cinco nodos. Cada nodo lleva a cabo sus propias actividades de investigación y sus programas de divulgación, mientras un grupo coordinador promueve la realización de intercambios entre las diferentes regiones y garantiza la gestión general de la comunidad de práctica. La COPEH-TLAC colabora con la comunidad de práctica canadiense, a través de la puesta en común de conocimiento técnico y estratégico.
Con el fin de consolidar su capacidad de investigación en ecosalud, la comunidad de práctica intercambia conocimiento y técnicas, a través de talleres y conferencias e incluso en una escuela de verano dedicada a la ecosalud, en México.
Demanda creciente de cursos de ecosalud en México
Desde 2002, gracias al apoyo del IDRC, el Instituto Nacional de Salud Pública de México ofrece un programa de capacitación de verano sobre enfoques de ecosalud para la salud humana. El programa contó con la presencia de disertantes invitados provenientes de todo el continente. En 2007, la escuela recibió más de 70 solicitudes para los 20 cupos disponibles. Los organizadores del curso están convencidos de que esta enorme demanda se debe a la creciente influencia de la COPEH-TLAC (la comunidad de práctica de la región).
Influencia en las políticas
La influencia que se ejerce en las políticas es un medio de transformación del nuevo conocimiento en un cambio duradero. Para lograr esto, se requiere el compromiso continuo de los formuladores de políticas durante el proceso de investigación.
Planes conjuntos para reducir las emisiones en México
En el distrito de Molango, el equipo de investigación sobre el manganeso y las comunidades de estudio están trabajando con las autoridades estatales y de salud para controlar la exposición y mitigar los efectos sobre la salud. El plan incluye el pavimento de carreteras para evitar el uso inadecuado del mineral residual para repavimentar los caminos locales, el desarrollo de estrategias para controlar el polvo en los hogares, el establecimiento de normas nacionales más estrictas relacionadas con la contaminación por manganeso y la implementación de programas de seguimiento para garantizar el cumplimiento.
Eliminación del plomo en Ecuador
En Ecuador, el equipo de investigación trabajó con las autoridades municipales y los líderes de la comunidad para desarrollar políticas y un plan de acción tendientes a reducir la contaminación del río aguas arriba y la exposición de la población, aguas abajo.
Los municipios de Zaruma y Portovelo, ubicados aguas arriba, han incorporado a sus planes estratégicos la gestión del medio ambiente y la salud. En los dos municipios, el equipo de investigación trabajó con los líderes de la comunidad y con las partes interesadas en el refuerzo de la conciencia ambiental. Se han creado clubes de jóvenes ecologistas como parte de diversas iniciativas de la comunidad. Dos comunidades aisladas, ubicadas aguas abajo, han comenzado a utilizar filtros de arena para reducir los niveles de contaminación química y biológica del agua, en tanto otra comunidad disfruta ahora de una planta de procesamiento de agua. Por otra parte, el gobierno de Ecuador se ha sentido presionado para limpiar los segmentos contaminados del río, antes de seguir adelante con un plan para construir una represa, en forma conjunta con Perú, que podría suministrar agua para la agricultura.
La ecosalud y los desafíos futuros para combatir la contaminación ambiental
El crecimiento económico mundial fomenta la rápida industrialización de la mayoría de los países en desarrollo.
La producción mundial de contaminantes ambientales seguirá en aumento a medida que incremente la demanda de alimentos y bienes de consumo. El cambio climático aumentará aún más la presión sobre los ecosistemas que ya se han vuelto vulnerables por la contaminación ambiental. Estas fuerzas a gran escala generan condiciones que limitan las opciones de los hogares pobres de los países en desarrollo, en cuanto al alimento, los medios de subsistencia y la salud. La investigación en ecosalud contribuye a identificar maneras sustentables de equilibrar las compensaciones económicas y ambientales, sin descuidar la protección de la salud humana.
Más información
- Descargue el informe: La ecosalud da sus frutos: La contaminación ambiental (PDF, 271KB)
- Consulte el libro de IDRC Ecohealth Research in Practice: Innovative Applications of an Ecosystem Approach to Health (La práctica de investigación en ecosalud: Aplicaciones innovadoras de un enfoque de ecosistema en la salud, para obtener más información sobre la investigación en ecosalud.
- La ecosalud da sus frutos: Transformaciones agrícolas
- La ecosalud da sus frutos: Las enfermedades infecciosas
- La ecosalud da sus frutos: La salud en entornos urbanos